Me sorprende mucho que bastante gente pida por twitter que participe en más podcasts. Es cierto que así no hay que ver mi faz de hobbit con ojeras, lo cual es una ventaja, pero hay que reconocer que tampoco es que tenga una voz muy radiofónica. De joffffen podía modularla para imitar a profesores del colegio. Sobre todo a mi madre.
Es que siempre he sido muy femenino.
Pero cuando los testículos hicieron PLOF, aquello se convirtió en un desastre sónico que culminó en el día en el que salí con un montón de exhibidores de cine a un karaoke y, a los cuatro minutos de ‘I Would Do Anything For Love’ de Meat Loaf, todos gritaron a coro un amable «¡QUE SE CALLE EL DEL PLUS!». Otra cosa no, pero criterio tenían.
Pero, mirad por donde que mi amigo Ángel Codón sigue llamándome a su ‘Tiempo de Culto’. Tanto que ya estamos planificando multitud de programas más. También tengo en mente aliarme con Miguel Ángel Aijón para hacer lo que sea. En las ondas, digo. Ya sé que en la peli tenemos química, pero no hasta el punto de placer carnal.
Tras unas semanas retirado del podcasteo, Ángel me invitó a unirme a Carlos Palencia y Jimina Sabadú a su programa sobre ‘Bola de Dragón’. Al principio no iba a ir. Prefería pasarme por el cine a ver ‘Batman: La Lego Película’, un flin que es bueno únicamente porque tiene un cameo de Richard Cheese. Pero, tras una cena con mi compañero de Videofobia comprobé que había tema: él iba a convertir el programa en una oda freak a esa tomadura de pelo que es ‘Dragon Ball Zeto’. Yo tenía que estar allí para trolear y defender que NADA puede superar la jrandeza de la serie original con chistes de tetas, momentos incómodos (Goku tocándole la entrepierna a Chi-Chi niña es un momento que sin duda sería objeto de censura en Salamanca) y chascarrillos de culos y humor de olor y flemas. Nunca entendí cómo la gente prefería tres semanas de señores metiéndose hostias como en ‘Matrix Revoltijos’ (cuyo clímax clarísimamente copiaba ‘Bola de Dragón Z’, lo cual ya nos da una idea de la desvergüenza de la serie) a Oolong transformándose en Bulma para enseñarle las tetas al Maestro Mariano Peña.
Así que aquí os dejo a Carlos apasionado y erudito, Jimina revelando su oscuro pasado y yo diciendo tonterías random mientras que Ángel intenta mantener el orden:
Y, como bonus track, el Videofobia Z sobre la adaptación coreana de Bola de Dragón del que hablamos en el episodio:
!function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?’http’:’https’;if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+’://platform.twitter.com/widgets.js’;fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, ‘script’, ‘twitter-wjs’);