Viendo cómo van funcionando las recientes elecciones municipales, a uno no le queda más remedio que gritar a pleno pulmón ese “Soy de Vigho, no lo niegho y lo digho con mucho orghullo”. Siempre dando la nota en el conjunto de EsP-P-Paña, Vigo ha ejemplificado a la perfección todo el surrealismo y la pérdida de papeles gallega.
Es por eso por lo que, en estos habituales posts cívicos antes de las elecciones (porque ya saben que, por boca de Mink Stole, John Waters nos recordaba el deber sacrosanto de votar saliendo arreglado y orinado de casa) voy a volver a pedir un posicionamiento inequívoco en las elecciones vighesas.
Muchos estaréis pensando: “Ya está. Va a pedir el voto por Sinaí Giménez: el Obama Gallego”. O “Príncipe de la Casa Real Gitana”. Y, oye, su demencial programa, garabateo de cualquier forma, es más de lo que puedan proponer infraseres como La Espe o Cospedal. Y, de nuevo, sus prácticas chúnger y mafiosas a la hora de asignar los chiringuitos de feria de Tui y alrededores no son nada al lado de lo que se pueda hacer en Madrid o Valencia sólo para elegir el color del uniforme de la señora de la limpieza.
Por supuesto, también valoro positivamente que reclute candidatas que hayan sido portada del Interviú o que un generoso escote proclame “Vigo necesita iniciativa”. Casi mejor que el poco sutil – y tristemente prohibido – “Voy a acabar con la mafia del PSOE. Palabra de gitano”. Con argumentos como estos poco da igual sus roces con los juzgados y su historial delictivo. O sus negocios turbios: feck, que hablamos de una comunidad autónoma en la que el presidente se hace fotos en un yate mientras un narco le da cremita…
No, realmente NO voy a apoyar a Sinaí Giménez – aunque tiene nominación a Onvre del año 2015 desde YA – porque… ¿Quién soy yo para apoyarle públicamente cuando ya ha recibido los parabienes de… Azúcar Moreno?
El Papa Francisco ha considerado pecado de soberbia intentar ponerse a la altura del mítico dúo. Y ese es uno de los caso en los que no se puede discutir que el santo padre habla ex cátedra.
No sólo de Sinaí vive el frikismo vighés, claro. Ciudadanos ha presentado a un candidato que, igual por no poder soportar más las tonterías de Albert Rivera, se ha dado a la fuga a pocos días de las elecciones. Pero, aunque hayan recibido una papeleta con el nombre de Jorge Luis Portela encabezándola… ¡No voten a ese hatajo de anormales! Recomiendo a nuestros lectores de sensibilidad más liberal – que los hay, hoygan, y nosotros respetamos el amor y que nos estrujen los senos venga del espectro ideológico que venga – que antes que apostar por el mongolismo naranja, voten por el PP. Más que nada porque, aunque no se presente, quiero creer que queda en ese partido algo de la esencia de la mítica Perli Porro (ex alcaldesa de Vigo y conocida de mi infancia: su hija iba a mi clase). Su impoluta peluquería tenía y tiene unos valores eternos. Y Perli ya fue celebrada en ente vlog en su guía turística sórdida de Vigo.
Así pues, ya sabe cuál es la recomendación, y es bien sencilla.
Que voten por mi amigo.
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El que está una o dos cabezas por encima del resto. |
En las elecciones pasadas, se quedó a 500 votos de entrar en el concello, y es una pena, porque su torrente verbal y frikismo que ya lucía cuando hacía conmigo y otros finstros un programa radiofónico sobre tebeos es algo que toda ciudad con VALORS necesita en su consistorio. Y ahora podría relatarles varias anécdotas que conseguían que amasen a Rubén incondicionalmente, pero que tendrían el efecto secundario de viralizarse en Whatasapps que acabarían con la carrera política de cualquiera. Así que no lo haré: créanme, aunque no consiguiese maquillar a Rubén igual que a Eric Carr.
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Esa juventud… |
Es muy probable que, dando la nota de nuevo en toda EsP-P-Paña, el ayuntamiento de Vigo sea el único con una mayoría absoluta: la del PSOE de Abel Caballero. Por ese motivo, a los finstros lectores de ente vlog que voten en Vigo, o que tengan amigos que vayan a hacerlo, les pediría una movilización para que Abel tuviese que vérselas con Rubén en más de un pacto. Sería como cuando analizábamos los tebeos de Rob Liefeld – o ‘Hazañas bélicas’ – mientras de fondo sonaba el tema ‘I Don’t Wanna Be a Homosexual’ de los Sloppy Seconds. Vamos, lo que la primera ciudad gallega merece. Eso por no olvidar una declaración del propio Rubén – que consta en su muro electoral de Facebook – de nombrar a mi señor padre concejal de urbanismo.
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Activismo anti-horrotondil en mi polígano. |
En esta ocasión, presentándose con ‘A Marea’, parece que tienen garantizados tres escaños, así que no voten chorradas como el Bloque o la atomización de izquierdas que no va a ningún sitio. ¡Voten a Rubén, coñe! Un candidato de dos por dos metros es el que mejor va a defenderles, no lo duden.