La liga fantástica de F1 2011. Round 9: Inglaterra.

Foto del autor

0
(0)
Suena la alarma del WhatsApp y, en vez de recibir una foto de The Monch tomándose un Frigodedo en un ámbito playero gallego, recibo un supersticioso mensaje de mi hermana que dice «Decides hacer la crónica y gana Alonso. ¡Ya no más invitados!». Lógicamente, uno puede cambiar la superstición y decir que, en realidad, lo que le ha dado suerte a Fernando es que haya visto la carrera en la misma tele mallorquina que retransmitió el gol de Iniesta. Pero mi superstición favorita es, lamentablemente, de índole cristiana: viendo el pelazo de Alonso en el podium, a uno sólo le viene a la mente esa canción de Gigatron en la que se dice que «Yo le hice una promesa a la virgen de las tachuelas. Que fue la que dio permiso al niño Dios para que se dejase melenas». Y vive Peich que la virgen de las tachuelas ha cumplido su parte del pacto. No sólo eso sino que, además, el extraño corte de pelo que lleva Alonso podría calificarse – por lo menos para mí – como protomullet. Y eso son cinco puntos, pero no adelantemos aún la clasificación.

De lo que toca hablar ahora es sobre el gigantesco cachondeo que la FIA ha organizado con los difusores soplados. Sobre ello he escrito en este número de Grand Prix Actual, pero voy a explayarme aquí. Así de sopetón, sólo puedo decir que la FIA LO HA HECHO DE MARAVILLA. No sólo por la prohibición en sí sobre el mapeado de gases en el motor, sino por la forma en la que lo han llevado a cabo. En un primer momento, tomaron, a mitad de campeonato, una medida descaradamente anti-Red Bull. La brillantez, sin embargo, estuvo en los intentos por irla tuneando – «bueno, puedes liberar gases al 50%» – y, luego, a pocas horas de los entrenamientos oficiales, volver a la ultrarrestricción original del 10% para desesperación y desquicie de Renault y de Christian Horner. En suma, lo que la FIA ha hecho es la clásica jugada de, a la pregunta discotequera «¿Follas?» responder un «Sí, pero contigo no»… ¡Sólo que añadiendo un epílogo de «No, que es broma, que sí follo» seguido de un «¿Te has creído que era broma? ¡Contigo no, bicho!».

Sí, siguiendo los principios de nuestro admirado Chato de Huévar, la FIA se ha comportado como una clásica perra de la noche/ Calientapollas maleducada que le baila «sessi» a la peña para luego dejarla tirada. Y, sinceramente, Red Bull se lo merecía. Porque, para ganar un campeonato no sólo hay que hacer bien los deberes, sino también dar espectáculo. Y el espectáculo no tiene porque ser lucha con otras escuderías: puede ser Prost contra Senna repartiéndose todas las victorias, puede ser ver a una escudería mítica como Ferrari resurgiendo de sus cenizas para ayudar a cierto alemán a pulverizar los récords de Fangio, puede ser ver a un equipo de pobretones al borde de la ruina como Brawn lograr triunfar con dos pilotos que Briatore inspiradamente describió como «Un parado y un mojón kilométrico»…

Pero, desde luego, dar un paseo triunfal con una escudería con CERO carisma en la historia de la F1 – lo siento, pero petarla en las concentraciones tuning de Baraka yendo toooo guapooo y tooo ciclaooo NO es F1 – en la que, merced a las dotes del Dr. Marko como castrador mental de Mark Webber no existe la lucha entre sus pilotos es exactamente lo contrario del espectáculo. ¿Qué puede alegar Red Bull para que la FIA no les cruja? ¿Un piloto que levanta el dedo cuandpo gana una carrera? Lo siento, pero para la generación que crecimos con los míticos latiguillos del Un, Dos, Tres de Mayra – el «¿Por qué seraaaaa? de la Bombi; el «¡No, hija, no!» de Antonio Ozores; el «Veintidó» del dúo Sacapuntas y una largo etcétera – lo del dedito de Vettel no hubiese pasado ni el primer cástig de Chicho Ibáñez Serrador. Sólo espero que Red Bull aprenda la lección porque, de lo contrario, seré el primero en aplaudir cuando la FIA les obligue a correr con ruedas cuadradas.

Allá van las puntuaciones:

PILOTOS

Star of the race:

Michael Schumacher: 24 puntos

Puede que hubiese dudas sobre si la star of the race de Valencia correspondía a Michael o a Vitaly, pero esta vez, su lamentable intento de adelantamiento a Kobayashi no aceptaba género alguno de discusión. Los 10 puntos por la colisión llevan dos de complemento de estilo y, a su vez, otros dos por el Stop and Go. No es que sea el mayor botín imaginable, pero los intentos de Schumi por afirmar su grandeza pasada son tan garantía de espectáculo como los de Tootsie por afirmar su heterosexualidad.

Narain Khartikeyan: 11 puntos

De momento, no se ha oficializado el despido. Cosas típicas en equipos como Hispania, que no tienen mayor problema en efectuar rotaciones conforme va y viene el dinero de los patrocinadores. Así que, en vez de los 25 puntos que se lleva un piloto de un equipo como Peich manda cuando le dan una patada bien dada, Narain sólo puede conformarse con 10 del despido por la puerta falsa. That’s life. A esa pechá de puntos sólo podrán aspirar Buemi o Alguersuari cuando quieran reemplazarlos por el nuevo prodigio/niño mimado de Marko: ese Daniel Ricciardo (1 punto por el nombre) que ha terminado a una vuelta de Liuzzi.

Paul Di Resta: 10 puntos

La mitad de los que aquí participáis habréis jaleado la plástica forma en la que reventó el neumático trasero a Buemi perdiendo su alerón delantero en el intento. Pero YA va siendo hora de hablar del gran elefante blanco en la habitación. O más bien del gran elefante negro. A vosotros, los que tenéis a Di Resta os pregunto: ¿Cuántos puntos negativos supone el ser representado por el padre del Mierda? Reflexionen la respuesta…

Kamui Kobayashi: 10 puntos

Cierto: los puntos por la forma tan lamentable en la que salió del pit y por el merecido drive through son para el equipo. ¡Pero la forma en la que gestionó su salida, arrasando con las mangueras de los rivales son pura genidalidad de Kamui! 4 puntos por la gañanería y 6 por el estilazo.

El Mierda: 10 puntos

Sus dos salidas de pista (1×2 + 1×2) llevan un complemento de estilo de un punto por reincidencia en la misma curva. Eso sí, aunque hubiese deseado que Massa lo adelantase en la última curva, no pude menos que aplaudir su viril defensa de posición sacado, de un certero golpe, a Felipe de su trayectoria. Un punto y otro de estilo, que lo cortés no quita lo valiente. Furthermore, le hizo media carrera a Alonso gracias a su tapón a Vettel y… ¿Acaso no nos supo a gloria cuando Fernando lo adelantó no mucho después de que las gradas inglesas hubiesen festejado lo contrario? Como premio por ello, un 1×2 por no haber sabido administrar la gasolina.

Sergio Pérez: 7 puntos

Salirse de pista y destrozar tu alerón delantero suele recompensarse con 2 puntos. Pero hacerlo con infinita plasticidad en el destrozo de la publicidad de Pirelli ¡y en la vuelta de instalación! Eso se merece 5 de estilazo para un Sergio que no nos defrauda.

Fernando Alonso: 5 puntos

Ganar co un Ferrari en Inglaterra es bello – sobre todo cuando no haces el desesperado intento publicitario de Vodafone/Buenafuente/promos de La Sexta del Mierda por intentar caer bien a la afición que te odia – pero no tan bello como hacerlo con ese protomullet que le supone 5 puntos. Fernando, otros 5 te esperan para cuando tu peluquero sepa depurarlo como los buenos cánones alemanes mandan (feck, en Mallorca me estoy hartando de ver obras de arte capilar, así que estoy MUY exigente).

Mark Webber: 1 punto

Los cinco puntos negativos que suponen el haber acatado órdenes de equipo son mitigados por la forma en la que lo hizo: levantando descaradamente en lo que era un insulto a su escudería en toda regla. Al final, una salidita de pista aumenta el casillero del ganador de la liga fantástica 2010 que, este año, sigue de capa caída. Pero nunca es tarde…

Pastor Maldonado: 1 punto

Again, un punto por una salida sigue alimentando la fe en una de las grandes promesas de este año que aún no ha eclosionado. Esperemos que Hugo venga pronto al rescate.

EQUIPOS

Team of the race:

McLaren: 27 puntos

Comenzaron el fin de semana inspirados, cuando condenaron al Mierda a la décima posición en la Q3 al hacerle salir a dar su primera vuelta con neumáticos machacados. Resulta inverosímil explicar a un equipo inglés que, en un país con un clima disparatado, hay que ir a asegurar lo antes posible, porque nunca sabes cuándo caerá un aguacero. Pero ese 2×2 se ve superado por el maravilloso cambio de neumáticos a Button: no llega al nivel de hacerle correr en Mónaco sn quitarle los protectores de los pontones, pero ese momento «¡Anormal, pero no vez que aún no le he puesto la tuerca!» añade ocho puntazos de estilo a los 4 de gañanería en boxes, además de uno extra por multa de la FIA. McLaren han sido profetas en su tierra.

Force India: 11 puntos

El pit a Di Resta, aunque no tuviese consecuencias tan funestas como el de Button, tuvo poco que envidiar al despelote de McLaren. La equivocación a la hora de escoger neumáticos seguro que hizo sentirse a los chicos de Hispania como «un equipo serio».

Team Lotus: 10 puntos

Doble abandono para Trulli y Kovalainen en una carrera en la que habían logrado ridiculizar a Toro Rosso en la Q1. Una penita…

Sauber: 6 puntos

Hicieron salir a Kobayashi cuando no debía, le cayó un drive thru por ello y, encima, una multa de la FIA: 4+1+1. ¡Pero la gloria mangueril es de Kamui! ¡Eso no se lo quita ni Peter ni nadie!

Toro Rosso: 2 puntos

Lo mismo que McLaren. No saber asegurar la Q1 a tiempo y ser superados por Kovalainen. Claro que en Toro Rosso no pueden beneficiarse del «Factor Mierda»…

Red Bull: -10 puntos

Sí, el pit a Vettel mereció un punto de estilo porque supuso la pérdida del liderato… Y entonces llegaron esas dos últimas vueltas. Normalmente, llegaría con haber dado -5 puntos por haber dictado las órdenes de equipo pero, como ocurre tantas veces en la vida, el que escupe hacia arriba termina con una flema en el ojo. O con una polla en la boca, todo depende de dónde lo hagas. Thing is, Christian Honer, por mucho que le llamen ‘Christian Horny’ y por mucho que su niño Vettel se dedique a ponerle nombres de actriz porno a sus coches no tiene el arte de Jenna Haze a la hora de escupir de la manera debida e indicada. Por eso, después de que Red Bull hubiesen construido su gran «imagen de marca» en el 2010 insultando a Ferrari tras las órdenes que la Scuderia dio a Massa, ahora estoy convencido de que Domenicali sigue descojonándose de la risa. Y, si Jenna Haze supiese de F1, también. ¿Se puede dar otro complemento de inestilo a Red Bull que no sean -10 puntos?

El equipo austriaco, justamente castigado por la FIA, está comenzando a descubrir lo que es la F1 de verdad. Puede que este descubrimiento venga acompañado de una pérdida de papeles sideral. De momento, han hecho su primer pitstop de mierda a Vettel pero, quién sabe, puede que, conforme avancen las carreras, la privilegiada posición de Hispania y Ferrari en lo alto de nuestra tabla comience a correr peligro.

Por lo pronto, Ferrari les acaba de machacar en el circuito donde se supone que los italianos deberían haber hecho el ridículo. Por favor, que comiencen los gritos de FIArrari. Sólo confirmarán lo que he dicho al principio: la Scudería merece TODO el trato de favor porque hay gente con materia prima para follarse lo que quieran en la discoteca mientras otros lloricas se preguntan que por qué no se comen nada en los templos Trance de Ibiza llevando una camiseta de DJ Spock.

Ya lo dijo David Lee Roth: así es la vida:

Vota esta publicación

¡Haz click en una estrella para puntuarla!

Puntuación media 0 / 5. Recuento de votos: 0

No hay votos hasta ahora! Sé el primero en calificar esta publicación.