Permítanme compartir con usarcedes un tubo de una canción que marcó mi infancia:
«El turista 1.999.999/ Cuando llegó, se lamentó/ Por bajar tan deprisa del avión/ con su mini pantalón/ Se ha perdido la ocasión/ De tener las atenciones/ Que por suerte le brindaron al turista dos millones/ Pero es igual/ Se conformó/ Y en Mallorca fue feliz como el que más». Comprendan mi frustaración cuando veía a un onvre que, con toda su calidad, lucía un mini pantalón… ¡y que, empero, no lograba ser cubierto de los agasajos y atenciones que merecía!
Por ello, en otro de esos momentos que producen vértigo – el hecho de que ente sórdido vlog vaya a llegar a la visita un millón – no se me ocurre mejor forma de conmemorar tal evento que quitándome la espina que me dejó esa canción.
A lo largo del día, se producirá la visita un millón, pero no queremos tirar del sitemeter para averiguar que dicho visitante es un fistro que llegó aquí buscando cosas tipo «Fotos de Amaia Salamanca desnuda» o, como casi la inmensa mayoría, «masturbaciones». Si bien no condenamos – sino que jaleamos – dichas actitudes erótico festivas, preferimos que los agasajos sean para alguien «de la casa».
SO…
Comenten ustedes – aunque sólo sea para decir que Hamilton es un mierda: eso nunca dejará de ser verdadero – y, el que efectúe el comentario en el momento en el que se produzca la visita 999.999 recibirá unos reghalos de calidad y valores éticos incuestionables (que, además, sirvan para algo y hagan feliz al receptor, eso ya es otra historia).
¡La carrera empieza YA!
PD: Bueno, la verdad es que sí hay una forma en la que Hamilton dejará de ser un mierda: si se descubre que su hermano, en realidad, es un figurante contratado para darle un punto de telefilm salchicheiro a las carreras. Y, de paso, 500 puntos para la liga fantástica.
*Editado: Ganó Rifle. Congratulations. A ver qué le mandamos. En breve: vuelve, tras un año de descanso, nuestra lista de películas favoritas del año.